El desarrollo del Capital Humano en cualquier corporación pública o privada, depende de factores de riesgo como el clima Organizacional, la Calidad Total y la Responsabilidad Social.
Si el clima no está al tope de su equilibrio la corporación no podrá exigirde sus colaboradores la máxima eficiencia y productividad, por ello la satisfacción de su capital humano en el trabajo es tema de suma importancia.
No siempre esa satisfacción se logra con dinero o promoción a niveles superiores. La Dirección oportuna y humana, la comunicación asertiva, la constante capacitación y el agregar valor permanentemente, son acciones necesarias para el equilibrio del clima organizacional y el cuidado de ese capital.
La Calidad Total es parte de la Misión y la Visión corporativa, la ética laboral que de ello se deriva debe conducir a un tratamiento humanista y holístico del trabajo como expresión humana, coadyuvante de relaciones interpersonales, familiares y sociales que alcancen a trabajadores, clientes y proveedores así como al entorno corporativo.
La empresa de hoy incorpora la Responsabilidad Social como Valor para el desarrollo y alcance de metas laborales y personales, dirigido a expandir procesos emocionales que afecten positivamente. Empatía, atención y comprensión fidelizan y comprometen a los colaboradores, disminuyen el estrés y los integran a sus obligaciones laborales seguros del reconocimiento que se le brinda a sus talentos.
Entonces es momento de pensar en el entorno, en el Capital Social que la empresa puede construir en la comunidad donde reside y abrir nuevos espacios de cooperación para insertarse como factor de decisión social y económica.
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